ENTREVISTA A NOEL PÉREZ BREY – ESCRITOR
PRIMERA PARTE: (Conocer al autor)
¿Qué lee en estos momentos?
Ahora mismo estoy terminando La playa de los ahogados, de Domingo Villar, libro que no solo recomiendo a los amantes de la novela negra, sino a cualquier lector, por su lenguaje directo, su trama urdida con brillantez y la precisa recreación de la costa gallega y la idiosincrasia de su gente… ¡qué morriña de los buenos tiempos que viví allí!
¿Cuál es su género favorito?, ¿y sus libros preferidos?
Aunque a la hora de leer no tengo ningún prejuicio y suelo guiarme por las inclinaciones o deseos de cada momento, lo cierto es que, por regla general, me decanto por la narrativa de corte realista. En cuanto a mis libros preferidos, cada cierto tiempo vuelvo a Catedral, de Raymond Carver, o a Dublineses, de Joyce, con la esperanza de que algo se me pegue, y, aunque a priori no tenga demasiada relación, a las dos Alicias, de Lewis Carroll.
¿Ficción o no ficción?
Sobre todo, ficción, aunque El arte de la ficción, de John Gardner, o La práctica del relato, de Ángel Zapata, que enmarcaríamos dentro de la no ficción pese a tratar del arte literario, son dos de mis libros de cabecera.
¿Tiene alguna manía de coleccionista bibliófilo?
No. Lo cierto es que, más allá de los cromos de fútbol que compraba de niño, no soy para nada coleccionista.
¿Destacaría alguna adaptación cinematográfica de algún libro leído?
Así, a bote pronto, La naranja mecánica, aunque parece ser que a Burgess no le gustó demasiado la adaptación, entre otras cosas, por la exclusión del capítulo final. En cualquier caso, la película de Kubrick es una obra maestra.
¿Papel tradicional o ebook?, ¿tapa dura o de bolsillo?
Me quedo con el olor, el tacto, el romanticismo del papel, y mejor de bolsillo, es más manejable.
¿Ha prestado libros no devueltos o no ha devuelto libros prestados?
Mis amigos son buena gente, siempre devuelven los libros. Pero yo he de confesar que, alguna vez, en aquellos tiempos en que no había dispositivos antirrobo en las puertas, me llevé de la antigua biblioteca municipal algún libro escondido en la mochila del colegio.
¿Cuál es su sitio preferido para leer?
El sofá de mi casa, sin duda.
¿Ha llorado o se ha reído con algún libro?, ¿con cuál?
Pues la verdad es que no soy demasiado sentimental. Por supuesto que muchos libros me han conmovido, me han emocionado, me han divertido, pero no hasta el extremo de que se me escape una lágrima o me ría a carcajadas.
¿Su cita literaria favorita?
Por su precisa concisión para reflejar tanto la afectación o doblez del ser humano en sociedad como su verdadera inseguridad y falta de certezas, tal vez me quede con una frase de Fiesta, de Hemingway: «Durante el día es fácil dárselas de duro sobre cualquier asunto, pero por la noche es otro cantar».
SEGUNDA PARTE: (Conocer la obra del autor)
¿Qué nos puede contar de El tiempo está próximo?
El tiempo está próximo es una sucesión de relatos entrelazados donde los personajes no solo afrontan la completa ruptura de su realidad cotidiana, sino también la soledad y la incertidumbre que esa nueva existencia conlleva. Ante esta fractura, trazada desde las diferentes edades de los protagonistas, los personajes encaran su inevitable situación a través del enfrentamiento, la inseguridad, la renuncia, la resignación de la derrota aceptada. Sin embargo, aunque cada uno de ellos surja culpable o redimido de esta suerte de apocalipsis personal, la estructura circular del conjunto sugiere un daño tan ineludible para los protagonistas como próximo para el resto de personajes, e incluso para el lector mismo a su vez, arrastrado a formar parte de las diferentes historias que la obra le presenta.
¿Tienen sus obras un género específico?
Por el momento me he centrado sobre todo en un relato corto cercano quizá al realismo sucio, como vemos en El tiempo está próximo, pero también he trabajado cuentos de fantasía, de humor, de ambientación histórica, y he publicado artículos y ensayos para distintas revistas literarias. Actualmente, además, estoy trabajando en mi primera novela.
¿Qué le atrae del formato de la ficción de relatos?
Su concisión, esa brevedad que te obliga a condensar el lenguaje, a limarlo de cualquier aspereza superflua, a fijarte en los detalles de veras significativos comprimiendo acaso toda una vida en ese momento de apocalipsis íntimo o personal que comentaba antes. En resumen, y tomando el conocido símil pugilístico de Cortázar, lo que me atrae sobre todo del «género» es la capacidad de un buen relato para vencerte por ko.
¿Qué le impulsó a escribir esta obra?
Mi intención al escribir El tiempo está próximo era mostrar no solo ese instante de ruptura en que tu vida cambia por completo o esa epifanía en la que adquieres conciencia de la verdadera razón que te empujó a donde te encuentras, sino también plasmar la soledad y la incertidumbre con que nos enfrentamos a ese tipo de situaciones. A todos nos ha pasado en mayor o menor medida, o nos pasará antes o después, nadie está a salvo. En este sentido, la estructura circular de la obra, que los relatos se entrelacen y mezclen, además de dotar de unidad al conjunto, simboliza esa inevitabilidad del desastre.
¿Qué le atrae de la parte más oscura e irreal de sus relatos?
Es cierto que la obra presenta cierto punto oscuro y que buena parte de los personajes generan o sufren algún tipo de violencia. Pero la violencia es algo inherente al ser humano y me atraía mostrarlo en los relatos. Los niños, antes de ser moldeados por la cultura, la educación, las normas sociales y demás, suelen afrontar los conflictos con cierto grado de violencia; bien lo sabemos quienes tenemos críos. Al crecer, aprendemos a dominar este instinto, entre otros cuantos, pero ante situaciones límite, ante ese apocalipsis personal que mencionábamos, muchas veces no sabemos cómo reaccionar, no solemos estar preparados para afrontarlo, por lo que surge la duda, el miedo, la crispación, y, cuando las normas y convenciones aprendidas no sirven de ayuda, es el instinto quien se pone al frente.
¿Cuál es su hábito de escritura, manías, protocolos?
Soy lo que llaman un escritor de mapa, así que, antes de ponerme a trabajar necesito tener al menos la línea general de la historia ya planteada. Aparte de eso, silencio y, en la medida de lo posible, escribir siempre en el mismo lugar.
¿Qué nos puede contar de la revista literaria Visor?
Revista Literaria Visor fue un proyecto que surgió en 2014 porque, si bien existían varias revistas literarias, no conocíamos ninguna dedicada en exclusiva al relato corto; la mayoría solían mezclar los cuentos con poesía, con fragmentos de novelas o incluso con reseñas de películas o artículos musicales, así que consideramos buena idea llenar ese hueco con una publicación centrada solo en la narración breve.
¿Entiende su obra como de entretenimiento o didáctica?
Bueno, no entiendo que ambas opciones deban estar reñidas. La teoría de la literatura le otorga a esta funciones para todos los gustos: hedonista, pedagógica, moralista, comprometida, lo que quieras, pero, si no pasamos un buen rato leyendo, mejor hacer otra cosa. Ahora bien, este deleite no tiene por qué ser una mera diversión, sin más pretensiones que leer una buena historia; puede suponer además un placer de algún modo intelectual. En este sentido, aunque El tiempo está próximo se ha concebido para que su lectura marche ágil y se disfrute de cada uno de los relatos, también se busca que el lector no sea solo un receptor pasivo de información, sino que participe y se involucre en las distintas historias, que forme parte de la suerte de los protagonistas, por lo que podríamos decir que participa de ambas opciones.
¿Cuáles son las claves de un buen relato corto?
Que te enganche desde la primera línea y su final sea tan inevitable como sorprendente. En este sentido, y al igual que en cualquier trama, es imprescindible que se presente un cambio en el personaje principal, y lamento decir que son muchos los relatos que nos llegan a la revista que incumplen este compromiso y convierten por tanto la historia en una simple anécdota.
¿Tiene algún nuevo proyecto literario entre manos?
Sí, claro. Mi próximo proyecto será una novela ambientada principalmente en Madrid, a principios del siglo XX, acerca de lo necesario de la ambición para conseguir tus objetivos, tus sueños, pero como, una vez descontrolada, puede llevarte a cometer los hechos más execrables.